miércoles, 24 de abril de 2013

Síntesis y Contextualización Sto Tomás


3.1. Teología racional y teología revelada.

STO. TOMAS distingue perfectamente entre el conocimiento acerca de Dios que es objeto de la Razón (Teología racional, natural o filosófica) y el conocimiento de Dios objeto de la Fe (Teología revelada, sobrenatural o religiosa). Ahora bien, Sto. Tomas, siguiendo a ARISTOTELES, sostiene que verdades como "Dios existe", y otras relativas a la esencia y atributos de Dios, sí son susceptibles de prueba o demostración racional: de ahí la posibilidad de una Teología natural, racional o filosófica que funcione como preámbulo o introducción a la Teología sobrenatural, revelada o religiosa.
Existe una clara distinción entre la filosofía y la teología, o lo que es lo mismo, entre la razón y la fe.  Este es el punto de conexión que nos permite llegar a los preámbulos de la fe.

3.2. Las vías y su estructura lógica

Santo Tomas cree en la posibilidad de establecer una demostración de  la existencia de Dios basada en la razón, ya que esta no es evidente para nosotros; Para ello utiliza las vías, que no se basan en la fe en la existencia de Dios, sino en un proceso lógico y razonado que nos lleva hasta la concepción de la existencia de Dios.
Para este filosofo existen dos clases de demostraciones: una llamada propter quid , en la cual se parte de la idea de algo y se deducen  ciertas propiedades a partir de esta idea. Santo Tomas utiliza otro tipo de demostración llamado quia que parte del principio de causalidad, que se encuentra omnipresente en sus cinco vías. Estas vías recorren distintos caminos para remontarse racionalmente hasta Dios, todos los cuales aplican el principio de causalidad. Presentan una estructura más o menos semejante, que es la siguiente:
·                    Se parte siempre de un fenómeno natural que sea observado es decir, un hecho de experiencia sensible.
·                     A este hecho de experiencia se le aplica siempre el principio de causalidad. Cada fenómeno viene a ser explicado en función de una causa que le precede.
·                    Se afirma que es imposible remontarse al infinito en la serie de las causas, ya que si no existiera una causa primera no podrían tener lugar todas las demás y tampoco sus respectivos efectos.
·                    Por ultimo, se llega a la conclusión de que esa causa inmutable, imperecedera y eterna es Dios, siendo éste, el ser y la esencia en si mismo.

A continuación resumiremos muy brevemente las cinco vías de Santo Tomas y su desarrollo:
Primera vía: El movimiento como actuación del móvil: Es cierto y consta por los sentidos, que en este mundo algunas cosas son movidas. Pero todo lo que es movido es movido por otro. Por tanto, si lo que mueve es movido a su vez, ha de ser movido por otro, y este por otro. Mas así no se puede proceder hasta el infinito. Luego es necesario llegar a un primer motor que no es movido por nada; todos entienden que éste es Dios.
Segunda vía: Experiencia de un orden de causas eficientes: Vemos que en este mundo sensible existe un orden de causas eficientes; pero no vemos ni es posible que algo sea causa eficiente de sí mismo, porque de lo contrario sería anterior a sí mismo, lo cual es imposible. Luego es necesario suponer una causa eficiente primera, que todos llaman Dios.
Tercera vía: La contingencia o limitación en el existir: Nos encontramos con cosas que tienen posibilidad de existir y de dejar de existir, pues algunas se engendran y se corrompen. Ahora bien, lo que tiene posibilidad de no existir alguna vez no existe. Pero dado que ahora existe algo, se entiende  que algo ha de ser necesario, y esto, en última instancia, es Dios.
Cuarta vía: Diversos grados de perfección en las cosas: Encontramos en este mundo cosas más o menos buenas, más o menos verdaderas, más o menos nobles, y otras cualidades así. Y como lo que es máximo en un género es causa de todo lo que se contiene bajo ese género, ha de haber un máximo ser causa de la bondad, de la verdad, de la nobleza y de las demás cualidades por el estilo; y este es Dios.
Quinta vía: El gobierno de las cosas: Vemos que algunas cosas que carecen de conocimiento, esto es, los cuerpos naturales, obran con intención de fin. Ahora bien, las cosas que no tienen conocimiento no tienden a un fin si no son dirigidas por algún ser cognoscente e inteligente. Luego existe algún ser inteligente que dirige todas las cosas naturales a un fin; que es lo que llamamos Dios.
4. Contextualización

Santo Tomás de Aquino es un pensador del siglo XIII, época caracterizada por el resurgimiento cultural de Europa, gracias al auge de las ciudades y del comercio, el florecimiento del arte gótico, la creación de composiciones polifónicas y la fundación de las primeras universidades, también la aparición de las órdenes mendicantes: franciscanos y dominicos.
Este texto pertenece a la obra Suma Teológica. El autor mismo la consideraba sencillamente un manual de la doctrina Cristiana para estudiantes. La razón se usa en Teología no para demostrar las verdades de la fe, que se aceptan por autoridad divina, sino para defender, explicar las verdades que tienen su fundamento en la razón.
El texto que esta sujeto a nuestro estudio se encuentra en el artículo 3 de la cuestión 2 de la obra titulada “si Dios existe”. En este primer articulo se expone si la existencia de Dios es evidente en si misma, aquí Santo Tomas se opone al pensamiento de que la existencia de Dios esta impresa en nosotros por la naturaleza. De esta forma en el artículo 2 se plantea si Dios existe o no existe; y la respuesta a esta pregunta se encuentra en el siguiente artículo donde se demuestra finalmente la existencia de Dios.


A continuación, analizaremos los distintos pensadores que influyeron en el pensamiento de Tomas de Aquino:

Debemos destacar a Platón ya que  influye de manera directa en la filosofía de Santo Tomás; de él toma la idea de los grados de participación-perfección: Según Platón,  las cosas del mundo sensible participan de las ideas del mundo inteligible; lo mismo ocurre con los cosas de este mundo (entes). Cada cosa participa, toma, de Dios, en algún grado o medida su bondad, nobleza y verdad, tal y como  vemos reflejado en la cuarta vía; También toma su concepto de dualismo cosmológico, (Mundo de las Ideas- Mundo de las Apariencias),  que el Aquinate adaptará a su concepto de Cielo y Tierra.

San Agustín. Las características del agustinismo filosófico son las siguientes: no hay separación entre la filosofía y la teología, la razón sirve a la fe y la fe ilumina a la razón. Este concepto también es utilizado por Santo Tomas, si bien, este último apostará por la defensa de su independencia, (separación y autonomía entre fe y razón), San Agustín mantuvo el dualismo antropológico platónico, separando el alma y el cuerpo. Tesis que también acepta el Aquinate, separándose de Aristóteles, que defiende que cuerpo y el alma están unidos.

Tomas coge de Avicena la distinción entre esencia y existencia, y la idea de la contingencia, aparece plasmado en la tercera vía, (el único ser al que le es esencial la existencia es Dios); lo cual lo vemos reflejado en la tercera vía. Se distancia de Averroes en las tesis de la doble verdad, argumentado que sólo hay una verdad, la verdad procedente de Dios.

Aristóteles: fue el filósofo que mas influyo en la forma de pensar de Santo Tomas, estos son los conceptos  más importantes que tomo de él, pero matizados por su concepción cristiana de la realidad:
·                    Ontología: conceptos de forma/materia, acto/potencia, substancia/accidente,  conceptos a los que Santo Tomás añade la oposición metafísica esencia/existencia.
·                    Teología natural o racional: Aplica el procedimiento racional principalmente en la primera, segunda y quinta Vía, o en la concepción de Dios como motor inmóvil, acto puro y forma inmaterial.
·                    Teoría del conocimiento: primacía de la experiencia en la fundamentación del conocimiento, aunque éste no se limita a lo dado a los sentidos: podemos conocer las realidades trascendentes (Dios y el alma).
·                    Antropología: concepción biologista del alma, división tripartita del alma: vegetativa, sensitiva e intelectiva, aunque Santo Tomás defiende con más claridad la inmortalidad del alma espiritual individual.
·                    Ética: el concepto y la clasificación aristotélica de la virtud, pero añade las virtudes sobrenaturales.
·                    Política: emplea las ideas de Aristóteles sobre la ley natural, y las completa con la referencia a la ley eterna (ajena al pensamiento aristotélico).
San Alberto Magno. Establece una clara distinción entre la investigación empírica y la teología. La filosofía partiendo de la experiencia, opera con la sola razón, mientras que la teología parte de la revelación divina. Son ciencias independientes, si bien la filosofía puede ser de utilidad a la verdadera teología.
 Se aleja de este planteamiento que San Anselmo de Canterbury usará, para demostrar la existencia de Dios, (“Dios es el ser mayor que el cual nada puede ser pensado”) centrada únicamente en el concepto de Dios y en la afirmación del mismo por medio de su solo pensamiento. La existencia de Dios puede ser demostrada valiéndose de la razón.
Por otro lado conviene mencionar a aquellos a quienes Tomas de Aquino influye, es decir, cuales serían sus influencias posteriores

Su influencia se percibe también en los racionalistas: Descartes utilizará las pruebas tomistas de la causalidad eficiente y la contingencia para la demostración de la existencia de Dios.
Sin embargo, Hume y posteriormente Kant no estarán de acuerdo con la aplicación de su teoría de la causalidad más allá de la experiencia.  

Nociones Sto Tomás


2. Nociones

Movimiento y Primer motor

En esta primera noción Santo tomas emplea el primer movimiento para probar la existencia de Dios. Está claro que los sentidos nos muestran que en el mundo hay cosas que se mueven o  que cambian, por lo tanto la existencia del movimiento  es innegable y evidente para Aristóteles y Santo Tomás. El movimiento es cuando se está en potencia, y es imposible estar en acto y potencia a la misma vez respecto a lo mismo. Santo Tomás también explica el principio de causalidad según la cual: ''todo lo que se mueve es movido por otro'' según él por Dios, un motor inmóvil, perfecto ya que no necesita buscar nada ya que tiene el máximo nivel de perfección. Este principio se basa en otras dos:
            - Todo lo que se mueve es movido por algo. Sí pues, lo que se mueve o está en potencia, es movida por otro que está en acto.
            - Lo que se mueve no puede ser lo mismo que lo que es movido.
También nos encontramos por otra parte, que es imposible remontarse al infinito buscando la causa en acto que provoca el movimiento de cada cosa. Por lo tanto, si tenemos una serie de motores móviles en la que cada uno mueve al siguiente tendremos que aceptar un primer motor, uno que moverá a todos los demás. Pero al haber movimiento en el mundo, ha de haber por lo tanto un primer motor, un motor inmóvil al que todos llamamos Dios.

Causa eficiente primera y ser necesario

La segunda vía (prueba por la causa eficiente) encuentra su origen en Aristóteles Pero fueron Avicena y Alberto Magno quienes utilizaron el razonamiento para demostrar la existencia de Dios. Santo Tomás sigue especialmente de cerca al primero de ellos.  
            En esta segunda vía se trata de constatar que hay un orden de causas eficientes. Esto significa constatar que hay cosas que producen otras y son a su vez producidas. La subordinación se debe a que lo que una causa produce, y por tanto la condición misma de su ser causa, depende esencialmente (su ser causa depende de esto) de que sea a su vez producida; por ejemplo, un hombre engendra a otro gracias a que es un ser humano, pero su humanidad hubo de ser producida por otro ser.
Santo Tomás afirma es que no hay nada que pueda ser causa de sí mismo. En efecto, en cuanto que el efecto depende esencialmente de la causa, ésta ha de ser necesariamente anterior a aquél, pero así las cosas, algo que fuese causa de sí mismo sería algo que estaría ya producido antes de ser producido, lo cual es imposible.
Mas, y aquí radica el tercer fundamento de la prueba, no podemos remontarnos al infinito en la serie de las causas.
Así pues, tiene que haber una causa primera que explica la existencia de todas las cosas y que es ella misma incausada. Es lo que entendemos por Dios.
 Si todos los seres son contingentes, alguna vez nada fue. Pero entonces nada existiría ahora, pues un ser sólo puede llegar a ser por virtud de otro que ya es. Pero ese ser, o tiene la necesidad en sí mismo, o la tiene causada por otro y como es imposible remontarse al infinito en la serie de las causas , ha de existir un ser que sea por sí mismo necesario. Es Dios por cuanto un ser necesario por sí mismo no tiene la existencia recibida ni participada, sino que es la existencia misma o el Ser.
Ser perfectísimo e inteligencia Ordenadora
El trayecto comenzado por Sto. Tomas para definir la esencia de Dios, pasa por adjudicar a Dios cualquier perfección que queramos admirar en la naturaleza de los seres humanos. El ser perfectísimo es el que obtiene un grado máximo de conocimiento sobre la bondad, la verdad y la unidad.. Existe algo que es verdadero, noble y bueno y por consiguiente, esto es algo que ya esta en el grado máximo. Pero lo optimo (máximo) en la verdad, también es optimo en el ser. El máximo de cada género es la causa, de todo dicho género. Debe haber algo que para todos los entes sea la causa de su bondad, su ser y de todas sus perfecciones, y a este algo se le llama Dios.
En la quinta prueba para probar la existencia de Dios, Santo Tomás considera a éste como causa del orden del mundo, como una ''inteligencia ordenadora'' que rige y dirige el ordenamiento del mundo.. Por lo tanto, santo Tomás hace uso del principio de casualidad. Si nosotros no admitimos la existencia de un ser necesario, quedaría totalmente imposibilitada la existencia de otro ser contingente, puesto que no habría otra cosa en el mundo, que hiciera posible su existencia real. Y como no podemos remontarnos al infinito en la búsqueda del ser necesario, concluimos finalmente que este es Dios.

Existencia de Dios y existencia del mal

 Sto. Tomas considera que la existencia de Dios no es algo evidente por si mismo contrariamente a la tesis de San Anselmo, para quien sí es evidente, ya que utiliza una demostración a priori: "Dios es el ser mayor que el cual nada puede ser pensado".. Considerando que hay que  seguir un procedimiento que vaya de los efectos a las causas. Así propone sus cinco vías que son distintos caminos para remontarse racionalmente hasta Dios, todos los cuales aplican el principio de causalidad. En la consideración de la existencia del mal, (sigue a San Agustín) afirma, que Dios, por ser el ser perfectísimo no admitiría el mal en el mundo, a no ser que de él  extrajera algún bien. Este es el caso, Dios que es absolutamente bueno, concede al hombre la posibilidad de elegir entre el bien y el mal, dotándolo del libre albedrío.. La persona creada, finita, en cuanto dotada de libre albedrío, que está ordenada al bien, puede, no obstante, elegir mal y realizar un acto moralmente malo.  

Resúmenes y Objeciones Sto Tomás


Resumen de las vías

Primera Vía
Esta vía habla del movimiento que es observable por los sentidos. En la primera vía, Santo Tomas es influido por Aristóteles y Averroes. En primer lugar, para demostrar la existencia de Dios, Sto Tomás parte de un fenómeno natural observable: hay movimiento en el mundo. Define el movimiento como el paso de potencia al acto. Todo lo que se mueve es movido por otro, este es el principio de causalidad, que niega el automovimiento. Por ejemplo, un tren compuesto por distintos vagones en movimiento, los vagones son movidos por una locomotora, éste sería el primer motor y el resto de vagones serían los motores intermedios. No podríamos remontarnos al infinito en esta serie de vagones sin llegar nunca a la locomotora. Es decir, lo que se mueve tiene que estar en potencia respecto de aquello hacia lo que se mueve y, por lo tanto, no puede moverse a sí mismo.
El proceso por el que una cosa mueve a otra no se puede prolongar indefinidamente puesto que en tal caso no se llegaría al primero que mueve y no habría motor alguno ni movimiento, pues los motores intermedios no mueven más que porque son movidos por otro. El primer motor que no es movido por nadie, y que causa el movimiento de los otros, es Dios.

      Segunda vía
Se encuentra influenciada por Aristóteles. Trata de la demostración de la existencia  de Dios, a partir de la existencia de causas eficientes. En el mundo hay un orden de causas eficientes, pero nada es causa de si mismo, porque seria anterior a si mismo. Es decir, no podemos  afirmar, que seamos la causa de nuestra propia existencia; es obligatorio que haya una causa externa por la cual existimos. Por ejemplo: Una niña está en el mundo debido al parto de su madre, a su vez la causa de la existencia de la madre es la abuela y así sucesivamente.  Si se quita la causa, desaparece el efecto, por lo que si en el orden de las causas eficientes no existiera la primera, no se daría tampoco ni la última ni la intermedia; si llevásemos hasta el infinito la serie de las causas, no existiría la primera causa eficiente, ni habría efecto último, ni causa intermedia.
Por lo tanto, no podemos remontarnos al infinito, porque esto no tendría ningún sentido, así que necesitamos aceptar la existencia de una primera causa, fuente de todas las demás, no causada por nada y esta causa es DIOS.

Tercera vía
 En esta vía, el autor es influenciado por Avicena, Aristóteles y Maimónides. Es llamada vía de la contingencia. La contingencia es el modo de ser de lo que no es necesario ni imposible, sino que puede ser o no ser el caso.  Y esta vía  parte de que en la naturaleza, hay seres contingentes, es decir, que pueden ser de otra manera, pueden existir o no existir. Cualquiera de nosotros existe hoy pero podría no existir mañana, o simplemente no haber existido nunca. Cualquier ser es contingente. Cualquier ser que existe, no empieza a existir más que por algo que ya existe. Por tanto si hubo un tiempo en el que nada existió, es imposible que empezara a existir algo. La experiencia nos muestra que las cosas pueden existir o no existir, pues pueden ser producidas o destruidas.
Por lo tanto tenemos  que aceptar la existencia de un ser que no sea contingente, es decir que sea necesario y esto significa que ha existido siempre, que es eterno y que su existencia no depende de ningún otro ser. Este ser necesario a partir del cual existen todos los demás seres es DIOS.
Cuarta vía
 Ésta es la vía de los grados de perfección,  está influenciada por Platón y Plotino. Es un hecho de existencia innegable (perceptible por los sentidos), que hay unos seres más perfectos que otros, todos no son iguales. El ser que reúne todas las perfecciones en grado sumo es el máximo ser, que a su vez es  causa de la existencia del resto de los seres. Por ejemplo, el máximo frío es la causa de todos los fríos. Si no existiese el ser perfecto no sería posible que nosotros pudiésemos alcanzar algún grado de  perfección, porque no habría referente con el que compararnos. Esto es, lo máximo es la causa de la existencia de lo mínimo; lo bueno es  causa de la bondad de los seres buenos, así como de la existencia de éstos. En conclusión este ser, responsable de la bondad, la perfección y la nobleza de los seres es  DIOS.

Quinta vía
En esta vía Santo Tomás es influenciado por Aristóteles, Platón y Anaxágoras.  Se basa en el orden que  rige en  las cosas y los seres pertenecientes a nuestro mundo. Para poder entender esta concepción de la realidad y su funcionamiento debemos partir de un hecho de existencia, el cual es, que todos los seres naturales, incluso los que carecen de conocimiento, obran para alcanzar un fin.
Todos  luchan  para conseguir un objetivo, y para llegar a su consecución, se debe seguir un proceso de manera ordenada que responda a un plan, no al azar.
Por ello podemos decir que para poder alcanzar sus objetivos y fines, como estos seres, han de  llevar a cabo un proceso ordenado  para alcanzar un fin de forma intencionada. La existencia de esta cadena no puede ser posible, porque no explicaría nada,  y como  el azar no puede ser causa del orden del universo, debe existir necesariamente un ser eterno, inmutable, e imperecedero a partir del cual, se ordenan todas las cosas naturales y sus movimientos para alcanzar diversos fines. Este ser lo llamamos Dios.

1ª Objeción
La primera de las objeciones se apoya en la existencia del mal. En el mundo hay mal y eso está comprobado por los sentidos. Suponiendo que Dios representa el bien absoluto, el mal quedaría anulado. Observamos que esto no ocurre así. En el mundo hay mal, y eso nos lleva a pensar que Dios no existe.

Respuesta a la primera objeción

Siguiendo a San Agustín, afirma que Dios nunca permitiría que existiese ningún mal, a no ser que de este mal sacara un bien. Esto forma parte de la gran bondad de Dios que permite el mal, porque considera que de él se puede sacar un bien mayor.

2ª Objeción
Todos los fenómenos y actos, encuentran su razón de ser o causa en una serie de principios, sin tener que recurrir a Dios como causa suprema; lo que es natural encuentra sus principios en la naturaleza, y todo lo que conlleva una  intención, tiene su causa en la razón y voluntad del ser humano. Por tanto, no necesitamos recurrir a la existencia de Dios para encontrar nuestra razón de ser y de los fenómenos que nos rodean.

Respuesta la segunda objeción

Santo Tomás responde alegando que las leyes de la naturaleza no pueden explicar por si mismas todos los fenómenos naturales, ya que estos actúan por un fin, y necesitan una primera causa que los dirija, una inteligencia ordenadora. Por eso, se necesita la existencia de una figura que dirija y ordene nuestra realidad, Dios.